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El amo de Verona: inicio de la saga de Daniel Blixt

Publicado: 2012-05-14

David Blixt es un actor que representa obras de Shakespeare, participó en varios Festivales de Teatro y vive en Chicago. Nada de la pequeña biografía que aparece en la carátula de su novela "El Amo de Verona" prometía que las 767 páginas de su libro sean tan cautivadoras y de las mejores que he leído en un buen tiempo, a pesar que se trate de literatura de entretenimiento.

Lectores intrépidos no se fijan en detalles

Vivimos tiempos extraños. La Internet y el mundo digital amenaza con hacerle al papel lo que este hizo con el pergamino. En la cultura cotidiana nuestra civilización da más atención a la fastuosidad de las llamadas "celebridades" que a la realidad violenta que la circunda. Mario Vargas Llosa la llama en su reciente libro (que comentaré después) la "Civilización del Espectáculo". Yo estoy tentado a pensar que vivimos un nuevo medioevo, cuando veo que en muchos lados triunfan los Cipriani, no por ser ellos mismos, sino porque sus ideas son compartidos por un populacho ciego y mezquino.

Se comprenderá que bajo esta idea, toda concesión a la lectura frívola o de entretenimiento podría parecer sospechosa. Lo cual me parece un grave error. La literatura es buena o mala dependiendo del talento del autor, no de la moraleja que se empeñe en dar. Visto desde este punto de vista no es un pecado leer los libros de caballería, o las leyendas artúricas aunque Cervantes nos prevenga sobre sus excesos. Tampoco es un crimen vibrar con las páginas llenas de intrigas de Alejandro Dumas, plenas de falsificaciones de la historia y con tramas deliciosamente elaboradas. La gran literatura de folletin del Siglo XIX no hubiera podido existir y nos perderíamos a Julio Verne y sus entregas de libros como La vuelta al mundo en 80 días, escrita sintiendo las pulsaciones del público.

La buena literatura es la narración que nos sobrecoge, entusiasma, asombra y fascina. Un narrador con talento te retiene con cadenas al sillón donde te encuentras leyendo, deseoso por saber que pasará a la vuelta de la página.

Y David Blixt tiene ese talento. Y es su primera novela, muy prometedora para dejarlo muy en claro.

La anécdota no parece ser más sencilla Durante (Dante) Alaghieri (Alighieri), exiliado de Florencia durante las famosas luchas entre los Guelfos (partidarios del Papa) y los Gibelinos (partidarios del Emperador del Sacro Imperio Románico Germánico) entra bajo el mecenazgo de Uguccione della Faggiuola.

Posteriormente, es invitado a la Corte de Verona donde se encuentra Francesco "Cangrande" della Scala, un audaz, enigmático y carismático guerrero en pugna con la ciudad de Padua. Contrariamente a lo que pudieran pensar la novela no tiene como eje principal al poeta, quien apenas participa en ella. La acción principal recae en su hijo Pietro que lo acompaña desde la muerte del primogénito. Su otro hijo, llamado Poco, hace honor a su apelativo. Jacopo Alaghieri es solo un chiquillo  con ganas de entretenerse y poco apto para grandes empresas. En Florencia han quedado la esposa de Dante, Gemma Donatti y su única hija superviviente, Antonia "Imperia" Alaghieri. Esta última no tardará en ir a Verona con su amado padre y destaca por ser una eficaz editora de las obras de Dante.

El carisma de Francesco della Scala (Scaligero, Gran Galgo, Cangrande, entre otros apelativos) lleva a Pietro Alaghieri y a los jóvenes que conoce en la Corte, Mariotto Montecchio y Antonio Capuletto, a una loca carrera a Vicenza cuando esta es sitiada por Padua. En una singular acción bélica y con la ayuda de una apenas cien personas y los pobladores disfrazados de arqueros logran poner en fuga a más de mil soldados confiados en su ventaja.

VERONA

Pietro es herido en la pierna y esta queda lastimada para siempre. Junto con sus amigos es nombrado Caballero y de a pocos empieza a obtener el favor de Cangrande con notables actos de arrojo. Incluso lo acompaña una noche tempestuosa en que Cangrande recibe un niño, el cual resulta ser su hijo natural, que va a parar a cuidado de su hermana, la bella Caterina della Scala, quien conoce que sobre el niño se cierne una importante profecía que sugiere que él será Il Veltro, la persona predestinada por el destino para traer la paz y una nueva era. Lo cual permite al autor reflexionar sobre el destino que guardan las estrellas para los hombres y cuánto podemos hacer para dominar el resultado de nuestras acciones a pesar del propio hado. Si la figura de Pietro atrae rápidamente la simpatía del lector, no es menos cierto que la figura de Cangrande es fascinante y llena de grandeza. Él ha hecho lo posible por ser el receptor de la gloria, el creador de su propio destino, aunque no sea más que para subvertir a los astros que inexorablemente lo han fijado todo.

Es cierto que en el capítulo final, algo frustrante por cierto, Scaligiero queda muy mal parado, pero eso es una maniobra deliberada del autor para hacer aún más grande el altruismo de Pietro, el único que no se mueve por intereses sórdidos y subalternos sino por genuino interés en defender al inocente, como es su lema de Caballero. Cuando leía esto no podía evitar la épica de los seguidores de Ollanta Humala en la segunda vuelta y la terrible frustración que deben haber sentido en los primeros meses de su gobierno. Pero David Blixt no escribía teniendo en cuenta la Gran Decepción de Ollanta Humala, sino con el ánimo de hacer una alegoría sobre las esperanzas que almas nobles depositan en ciertos líderes que no siempre se encuentran a la altura moral para merecerlas. Es algo en que David Blixt imita a Dante quien creó terribles alegorías para ilustrar las grandes traiciones y crímenes del Siglo XIV en su infierno colosal.

En adelante la novela transcurre entre sórdidas intrigas para asesinar al heredero de Cangrande a la vez que los amigos de Pietro, Montecchio y Capuletto entran en conflicto por el amor de Gianozza ¿se imaginan a dónde apunta el autor? No les sorprenda, hay Shakespeare por todos lados. Y no solo Romeo y Julieta, también aparece el judío Shalack de Venecia (¿les suena cierto judío que pone como cláusula penal unas libras de carne humana?), o la referencia poco velada a Macbeth en palabras de Cangrande casi al final de la obra. Contrariamente a lo que pudieran pensar no son referencias gratuitas sino bastante sofisticadas y estudiadas. La propia enemistad entre los amigos de Pietro, Mariotto Montecchio y Antonio Capuletto, es muy interesante y ofrece un fascinante giro de tuerca sobre el mito de los amantes veroneses y sus trágicas consecuencias.

No exagero entonces al decir que la novela tiene una trama envolvente, sentimientos y pasiones encontradas, muchas alusiones cultas al siglo XIV y a la Divina Comedia de Dante, así como ofrece una amplia visión del contexto político y social de la época. Sería injusto olvidar mencionar que el trabajo de investigación realizado por David Blixt ha sido espectacular. Ha creado una novela de género histórico con detalles tan cotidianos que por momentos el lector se encuentra allí, sufriendo los crudos inviernos veronenses o dentro del fragor de las batallas.

CANGRANDE

El typepad de David Blixt tiene sorpresas como su libro

La trama de la novela no cesa de dar inesperados giros y no queda claro sino hasta el final quién se encuentra detrás del complot (afortunadamente no es el mayordomo como en el viejo chiste) y sus reales motivaciones. Aunque queda un enorme cabo suelto (dejado a propósito) sobre el terrible secreto que el Conde de San Bonifacio se lleva consigo al más allá. Probablemente el autor tiene más cosas que contar en una probable secuela de esta ambiciosa novela. Aunque podría tratarse de una cita hiper culta (que plagan el libro) cuya interpretación se me escapa.

Merece mención aparte algunas partes excelentemente logradas en la narración como la recuperación de Vicenza de manos de los paduanos, el banquete con los prisioneros que deviene en una conversación sobre el destino en las estrellas y un notable contrapunto entre Dante y un eclesiástico, la carrera del Palio, el affaire entre Gianozza y Montecchio, el rescate del hijo de Cangrande prácticamente de las fauces de un leopardo, el duelo entre Pietro y el venal Marsilio da Carrara, su jurado archienemigo, así como el esplendido epílogo en que dos luciérnagas simbolizan de manera sutil el final de una novela hecha al ritmo de una cabalgata en la famosa carrera del palio en Verona.

Entrevista a David Blixt

No se si es un rumor pero esta novela aparecida el 2008 ya está prevista para ser otro blockbuster hollywoodense. Fijense aquí:

http://mybookthemovie.blogspot.com/2009/02/david-blixts-master-of-verona.html

PADUA

FLORENCIA

Friday, February 13, 2009

David Blixt's "The Master of Verona"

In David Blixt's The Master of Verona, Shakespeare's Italian characters meet the historical figures of Dante's Inferno, setting the stage for the famous Capulet-Montague feud from Romeo & Juliet.

Here the author picks the director and principal cast for a film adaptation of his novel:

Directed by:

Peter Weir

Starring:

Hugh Jackman as Cangrande della Scala

Jake Gyllenhaal as Pietro Alaghieri

Cate Blanchett as Katerina della Scala

Robert Pattinson as Mariotto Montecchio

Chris Pratt as Antonio Capulletto

Anne Hathaway as Gianozza della Bella

Avery Brooks as Tharwat al-Dhamin

Stacy Keach as the Count of San Bonifacio

Ritchie Coster as Asdente

and

Peter O'Toole as Dante Alaghieri

Si tal fuera el caso, me apunto para verla en su estreno.

Para finalizar la ficha bibliográfica de la novela.

DAVID BLIXT

EL AMO DE VERONA. Barcelona: Vía Magna. Marzo 2008. Primera Edición. 767 páginas. Traducción de María Teresa Villares.


Escrito por

locomotion

Nadie sabe que Master Locomotion esconde a su alter ego super heroico Amílcar Adolfo Mendoza Luna, Master en Derecho.


Publicado en

peruesunaaldeadechile

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